
Daisy Garcia Montoya
Reportera de Educación
Miembros de la comunidad, familiares y estudiantes se reunieron en Drexel Hall el jueves 12 de junio para celebrar un año más del programa Hurtado Scholars de Rockhurst High School y honrar los logros de los estudiantes.
Desde su creación en 2013, el programa de Hurtado Scholars ha proporcionado a los estudiantes de la escuela las herramientas y recursos que les permiten prepararse mejor para una escuela secundaria preparatoria, una escuela secundaria designada para preparar a los estudiantes para educación de universidad.
El programa, que lleva el nombre de San Alberto Hurtado, SJ – un sacerdote chileno de Jesús que se centró en ofrecer vivienda y educación a niños en su país natal de Chile en Sur América – ha servido a 142 niños en sus 13 años de historia, proporcionando apoyo a estudiantes de comunidades de escasos recursos durante su transición de escuela primaria y secundaria y universidad.
Los estudiantes del programa de becarios son nominados al programa antes de su sexto año de escuela por su respectiva escuela diocesana de Missouri asociada, que incluye la escuela Nativity of Mary, la academia St. Regis, la escuela católica Our Lady of Hope y la escuela católica Holy Cross, situadas en el noreste histórico.

Después de recibir la nominación, los estudiantes pasan por un riguroso proceso de admisión que incluye entrevistas y evaluaciones de resultados de exámenes y notas.
Una vez aceptados en el programa, entran en una academia de verano de cinco semanas en la que los estudiantes se centran en la instrucción básica, así como en excursiones culturales y recreativas.
El director del programa, Anthony Rea, dijo en una entrevista que el programa pretende eliminar las barreras financieras y educativas de los estudiantes mientras se preparan para la universidad.
Aunque el programa sirve como un camino para llegar a Rockhurst High School, Rea dijo que asistir a la escuela secundaria no se requiere de los estudiantes que se convierten en un Hurtado Scholar.
“Si optan por venir, sabemos que están listos para entrar como líderes y estudiantes, y usted sabe, miembros de co-curriculares, como jugadores, lo que sea que quieran hacer mientras estén aquí”, dijo Rea.
Para poder proporcionar una atención personalizada, el programa tiene cohortes pequeñas cada año – lo que permite más apoyo de uno-a-uno, así como conexiones más fuertes entre los estudiantes y el personal.
La colaboración entre las escuelas y los padres, según Rea, es una de las razones por las que el programa ha seguido prosperando de la manera en que lo ha hecho. Con la confianza ya establecida con las escuelas asociadas, los padres y los estudiantes se sienten más cómodos al iniciar su nueva etapa mientras se involucran más en el nuevo ambiente.
En la recepción, el personal y los estudiantes, así como los miembros de la comunidad y los donantes, pudieron interactuar entre sí mientras celebraban a los becarios de este año. Los testimonios y la información de la última promoción de becarios Hurtado se podían encontrar en tablones de presentación repartidos por la sala para que los asistentes pudieran leerlos.

Durante una entrevista, el estudiante de sexto grado Joshua Hernández compartió que ser un becario Hurtado significa que le permitirá acceder a una buena educación y la oportunidad de conocer a otras personas de diferentes escuelas antes de ingresar a la escuela secundaria.
Para Simon Henggeler, alumno de octavo grado, ser parte del programa Hurtado significa que está un paso más cerca de seguir los pasos de su padre y su abuelo, quienes asistieron a Rockhurst High School.
“Mi abuelo también fue a esa escuela, por lo que es muy agradable ir con ellos, con mi hermano, y voy a ser capaz de aprender mucho más” , dijo Henggler. “Cuando vaya a Rockhurst, no voy a estar nervioso en conocer a otras personas, y voy a conocer a esos maestros, para tener al menos algunas conexiones antes.”
Los estudiantes continuaron compartiendo que el programa los hizo sentirse bienvenidos en Rockhurst y les permitió crear una hermandad con otros estudiantes.
“Convertirse en un líder, y llegar a conocer a más estudiantes realmente te ayuda en la escuela secundaria, porque tan pronto como entras, ya sabes lo que estás haciendo, y es muy útil”, dijo el estudiante Aaron Hernández que entrará a la secundaria.
Al concluir la celebración, los asistentes disfrutaron de aperitivos y de una hora de socialización.
Por más información sobre el programa de Hurtado Scholars, visiste: https://www.rockhursths.edu/about-us/hurtado-scholars-program.